Esta semana, la Casa del Poeta está llevando a cabo diversas actividades para conmemorar el 107º aniversario del nacimiento del aclamado autor.
Antonio Esteban Agüero fue una figura trascendental tanto para los merlinos como para la provincia, dejando un legado de obras que siguen siendo relevantes y perduran muchos años después de su partida.
El miércoles se celebró un acto en su honor en “su casa”, la cual donó para ser recordado. Participaron numerosos merlinos, dirigentes y descendientes en una jornada emotiva, donde los oradores destacaron la alegría de poder visitar nuevamente ese lugar tan ligado a la identidad merlina.
Ayer, durante la presentación del libro “Relatos del Pasado” del historiador merlino José Mario Costamagna, este se refirió a la importancia del evento diciendo: “A nivel personal e institucional, a través de mi participación en el Centro de Historia de Merlo, tengo la satisfacción de poder, luego de casi ocho años, participar en un evento en el lugar cultural más emblemático de Merlo, la casa del poeta Agüero, con el deseo de que recupere definitivamente su esencia y nunca más sea un ámbito para actividades políticas, preservando el legado de nuestro poeta máximo, Antonio Esteban Agüero”.
Durante los últimos ocho años, la Casa del Poeta no solo cambió exteriormente, perdiendo algo de su mística pero no su esencia, sino que también se convirtió en un búnker político del gobierno de Alberto Rodríguez Saá, privando a los merlinos del acceso a este espacio emblemático de nuestra cultura.
Este lugar nos ha visto nacer, crecer y sentirnos orgullosos de nuestro creador cultural, quien nos representa junto con el Algarrobo Abuelo, la Plaza Sobremonte y las hermosas sierras. Es un símbolo más de alegría y orgullo por ser parte de esta sociedad que comenzó siendo un pequeño paraje rodeado de naturaleza, la cual Agüero describe tan bien en sus palabras, a una comunidad extensa y profundamente orgullosa de su identidad, costumbres, paisaje, clima y de su amado Poeta.